13 septiembre 2006

Hotel Moscú

Este es el nombre del Hotel en el que nos hospedamos cuando vamos a San Petersburgo. José Ramón ha puesto un link a la derecha de estas letras donde podéis ver lo maravilloso que es-según la página-. En realidad no está mal del todo. Es un tres estrellas reformado. Ocupa una esquina de la Avenida principal de la ciudad. Tiene 6 plantas y cada una puede tener una longitud de 400-500 mts -sin exagerar que las recorrí una noche buscando una botella de agua. Tiene un 24 horas en la cuarta planta -impresionante-, varios restaurantes, peluquería, ...Es un mastodonte que parece un hormiguero. Totalmente soviético en su estructura, las reformas maquillan algunas cosas. Por ejemplo, la escalera que vemos en la foto, accesoria, es de la época de Stalin por lo menos.
Hablando de Stalin, era impresionante ver el barrio soviético puro que existe en la ciudad. Casas en las que se comparte baño y comedor, bloques gigantes con ventanas cuadriculadas, edificios en patético estado donde sigue viviendo la gente. Muy fuerte.
A nuestra llegada al hotel, unas chicas muy amables nos sonreían en el hall. Pensando en el buen servicio del hotel, sonreimos amablemente también. Pero en este gesto me di cuenta de la escasez de las faldas y de las sospechosas transparencias de las blusas. Como estuvimos en el hall un rato, vimos que ese grupo de amigas ni eran del hotel, ni se hospedaban en él, que ni eran amigas entre si y que lo que si querían eran establecer relaciones de amistad con otros, preferiblemente varones. A lo largo de los días pudimos comprobar que las chicas iban rotando, aunque alguna repitió el último día. Aparecían sobre las 8 de la tarde y cuando nos fuimos a las 4 y media de la mañana del hotel todavía estaban allí.
El restaurante del desayuno es para verlo. Es como una gran boda en un local de varios niveles con más de 500 invitados. Impresionante. El menú, arenques, cremas de avena de sospechoso contenido, café aguado, salchichas, huevos duros con yema blanca?...no invita especialmente a saciarse. Preguntamos por jamón, pero no había.
Como veis en en el link, tiene Fitness Center, y como Inma va todos los días al Fitness First de al lado de casa y lo paga, en el próximo viaje dice que se lleva el chandal.
Tiene un restaurante donde la cerveza small es de medio litro y la big de uno. Suponemos que, como en invierno es casi todo el dia de noche y esta nevado, pues con las cañitas que ponen pasa uno el tiempo tan ricamente y se acuesta "calentito".
En fin, ese es el hotel que de nuevo nos invita a acudir dentro de escasos días.

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